viernes, 10 de junio de 2016

¿QUÉ TEMEN DE PODEMOS?

Muchos seguidores de Podemos, con un análisis ingenuo y simplista, creen que porque sean atacados por la caverna mediática, son temidos por esta y sus satélites. Nada más lejos de la realidad, también era atacado Carrillo y les ayudó a denunciar a comunistas, a imponer la farsa de la transición, a defender la Constitución, la monarquía, el fin de la lucha de clases, etc. También Zapatero era acusado de proetarra por la caverna mientras sus jueces eran cómplices de torturas, se ilegalizaban organizaciones antifascistas con el “todo es ETA” y eran detenidos decenas de militantes de la organización armada vasca.

Que Podemos no sea todo lo que quisiera la derecha, no implica que supongan un peligro para sus privilegios, de lo contrario no pedirían que no se les votara, directamente lo ilegalizarían. Los fascistas dejaron muy claro en el 39 que si se tocan sus privilegios saqueados a la clase trabajadora, responden con las armas y los asesinatos que sean necesarios. Ellos no se andan con chiquitas, por eso vencieron y vencen. Es otra cosa de Podemos la que les preocupa seriamente:

Podemos surge para canalizar la rabia y la frustración de millones de personas que empezaban a ver que aquí no hay democracia, con sectores más radicalizados dentro de estas que no veían con malos ojos la lucha contundente en las calles y que incluso algunas la practicaban.  Recogen esa rabia y la duermen en las urnas. Eso, por razones obvias, al Estado le interesaba y por eso les dieron cancha. Los medios de manipulación les dieron bombo a todas horas y Podemos subió como la espuma. El régimen creía que Podemos se quedaría en una fuerza residual como IU, con a lo sumo, el doble de votos. Eso, pensaban, les serviría para canalizar la rabia de alrededor de 2 millones de personas teniéndolas controladitas bastantes años con la esperanza de un día tocar gobierno.

Pero no, se les fue de las manos y Podemos llegó a los 5 millones de votos con la posibilidad de tocar gobierno con los GALosos del P$OE. ¿Eso significa que tengan miedo a lo que puedan hacer cuando lleguen al gobierno? Ni mucho menos, saben y así lo ha dicho el portavoz de los explotadores, el presidente de la patronal Juan Rosell, que Podemos no puede impedir sus planes y tampoco tienen intención de poner fin a la explotación. Tanto es así que quitaron de su programa para las europeas la propuesta de acabar con las ETT’s, el colmo de la sobreexplotación.  Syriza es una prueba más de cómo Podemos se va a plegar a lo que la UE imponga, ni siquiera plantean la salida de esta. Por lo tanto, no suponen riesgo alguno para los privilegios de tantos explotadores manchados de sangre. Entonces, ¿qué temen?


Temen a lo que venga después de que Podemos toque gobierno y quede evidenciado que por esa vía no hay salida alguna para la mayoría. Porque más pronto que tarde, las masas saldrán a buscarlo a las calles y lo que pueda surgir de ahí, si se transforma en organización revolucionaria, sí que hace temblar a oligarcas y demás parásitos. No quieren quemar tan rápido esa llegada de Podemos al gobierno, porque entonces se les acaban las trampas para contener la rabia de la clase obrera. Les dieron demasiado bombo por la tele e infravaloraron el descontento popular, llegaron a los 5 millones de votos y si ahora acaban tocando gobierno, en pocos años se puede montar una muy gorda en las calles. Eso es lo que temen, que las urnas dejen de frenar la rabia de tantas personas hartas y desesperadas. Por eso no temen a Podemos, temen lo que venga después del desencanto con estos farsantes.