Muchos seguidores de Podemos, con un análisis ingenuo
y simplista, creen que porque sean atacados por la caverna mediática, son
temidos por esta y sus satélites. Nada más lejos de la realidad, también era
atacado Carrillo y les ayudó a denunciar a comunistas, a imponer la farsa de la
transición, a defender la Constitución, la monarquía, el fin de la lucha de
clases, etc. También Zapatero era acusado de proetarra por la caverna mientras
sus jueces eran cómplices de torturas, se ilegalizaban organizaciones antifascistas
con el “todo es ETA” y eran detenidos decenas de militantes de la organización
armada vasca.
Que Podemos no sea todo lo que quisiera la derecha, no
implica que supongan un peligro para sus privilegios, de lo contrario no
pedirían que no se les votara, directamente lo ilegalizarían. Los fascistas
dejaron muy claro en el 39 que si se tocan sus privilegios saqueados a la clase
trabajadora, responden con las armas y los asesinatos que sean necesarios.
Ellos no se andan con chiquitas, por eso vencieron y vencen. Es otra cosa de
Podemos la que les preocupa seriamente:
Podemos surge para canalizar la rabia y la frustración
de millones de personas que empezaban a ver que aquí no hay democracia, con
sectores más radicalizados dentro de estas que no veían con malos ojos la lucha
contundente en las calles y que incluso algunas la practicaban. Recogen
esa rabia y la duermen en las urnas. Eso, por razones obvias, al Estado le
interesaba y por eso les dieron cancha. Los medios de manipulación les dieron
bombo a todas horas y Podemos subió como la espuma. El régimen creía que
Podemos se quedaría en una fuerza residual como IU, con a lo sumo, el doble de
votos. Eso, pensaban, les serviría para canalizar la rabia de alrededor de 2
millones de personas teniéndolas controladitas bastantes años con la esperanza
de un día tocar gobierno.
Pero no, se les fue de las manos y Podemos llegó a los
5 millones de votos con la posibilidad de tocar gobierno con los GALosos del
P$OE. ¿Eso significa que tengan miedo a lo que puedan hacer cuando lleguen al
gobierno? Ni mucho menos, saben y así lo ha dicho el portavoz de los
explotadores, el presidente de la patronal Juan Rosell, que Podemos no puede
impedir sus planes y tampoco tienen intención de poner fin a la explotación. Tanto
es así que quitaron de su programa para las europeas la propuesta de acabar con
las ETT’s, el colmo de la sobreexplotación. Syriza es una prueba más de
cómo Podemos se va a plegar a lo que la UE imponga, ni siquiera plantean la
salida de esta. Por lo tanto, no suponen riesgo alguno para los privilegios de
tantos explotadores manchados de sangre. Entonces, ¿qué temen?
Temen a lo que venga después de que Podemos toque
gobierno y quede evidenciado que por esa vía no hay salida alguna para la
mayoría. Porque más pronto que tarde, las masas saldrán a buscarlo a las calles
y lo que pueda surgir de ahí, si se transforma en organización revolucionaria,
sí que hace temblar a oligarcas y demás parásitos. No quieren quemar tan rápido
esa llegada de Podemos al gobierno, porque entonces se les acaban las trampas
para contener la rabia de la clase obrera. Les dieron demasiado bombo por la
tele e infravaloraron el descontento popular, llegaron a los 5 millones de
votos y si ahora acaban tocando gobierno, en pocos años se puede montar una muy
gorda en las calles. Eso es lo que temen, que las urnas dejen de frenar la
rabia de tantas personas hartas y desesperadas. Por eso no temen a Podemos,
temen lo que venga después del desencanto con estos farsantes.