Hoy ha aparecido en varios medios de todo el Estado, la noticia de que hace dos noches fui atrapado por la policía junto a un compañero tras darnos a la fuga por realizar unas pintadas contra el alcalde. El objetivo de esta campaña es añadir más cargos en el juicio que tengo pendiente por hacer una canción denunciando las políticas mafiosas e injustas de Àngel Ros junto a Ciniko, por la que se nos pide 1 año y 3 meses de prisión. Eso, con mi condena firme de 2 años de prisión de la Audiencia Nacional también por hacer canciones, podría suponerme el ingreso en prisión. La manipulación llega a ser tan repugnante, que se me acusa de hacer junto a un compañero unas pintadas contra el alcalde que ya estaban hechas por solidarios desde bastante antes.
La
Guardia Urbana quiere colgarse la medallita, como si no tuvieran otras cosas
más importantes que hacer, de haberme atrapado por pintar contra el alcalde. No
pudieron encontrarme spray alguno y mis manos estaban limpias, pero basta su
palabra para que los medios con su sensacionalismo cutre, difundan la farsa por
todo el Estado como si, aunque fuera verdad, tuviera importancia. Todo lleva a
pensar que lo han consultado previamente con el alcalde para darle bombo, pues
esto sale dos días después en la prensa de todo el Estado cuando al día
siguiente en la local sólo aparecía una pequeña noticia en la que ni se me
mencionaba.
Para
colmo, en la pintada del puente de la que hablan los medios y de la que nos
acusa la policía, no ponía nada sobre el alcalde. Ya puestos, podrían acusarme
de absolutamente todas las pintadas reivindicativas de la ciudad, aunque tengan
caligrafías totalmente distintas, pues así han procedido con estas. En la denuncia que nos entregó la Urbana, no aparece lo que sale en los medios de manipulación. Estos también
han aprovechado la ocasión para volver a verter basura sobre mi, volviendo a
repetir que apoyo a Al Qaeda cuando he denunciado en mis canciones que USA creó
esta organización. La policía no encontró spray alguno, pero ha inventado que
lo tiramos a la canalización del río cuando corrimos en dirección contraria,
por lo tanto es físicamente imposible. No saben ni mentir bien. Lo único cierto
es que nos dimos a la fuga, harto del acoso que sufro por parte de la policía
con seguimientos, registros cuando voy en el coche de algún colega, cacheos,
etc. Basta que ande por la calle de noche para que me paren y me cacheen. Esa
noche no estábamos dispuestos a aguantar su acoso y huimos, pero fue imposible
rodeados por tantos coches policiales. Si pusieran el mismo empeño en detener a
quienes dejan a familias en la calle o saquean millones de dinero público,
igual saldría menos gente a hacer pintadas reivindicativas. El resto es un
cuento que en cuanto la policía lo ha puesto en conocimiento del alcalde, lo
han aireado por todos los medios del Estado como si se me hubiera atrapado
tirando un cóctel molotov en su casa.
Están
muy equivocados y son muy torpes si creen que me voy a echar para atrás con
acosos y represión o que así van a silenciarme. Su represión sólo dará más
fuerza a nuestro mensaje, ellos verán.